viernes, 2 de diciembre de 2011

ENTRE COL Y COL UNA LECHUGA PALLLLL LORO


Art. tomado de la Revista Columba, escrito por Enrique Perez; titulado Un sueño hecho realidad.

            No tengo por más que felicitarle por esas dos primeras columnas, escribes y describes, sensaciones, que ya he escuchado de boca de muchos aficionados al palomo Colillano. ¿Donde lo he leído o escuchado  antes? ¡Ahora caigo!: todos los años, en Fuentes de Andalucía y en la taberna del Tomas; y por si fuera poco, mil veces de boca de Virgilio Rivero, Antonio Vega, Jesus, y muchos más. ¿Vais pillando la frase: ¡PALLLL LORO!?
            Pero como no hay dos sin tres, ahora nos coloca la gramola del cuento y nos deleita cual cantinela repetitiva a modo de bucle, todo lo que tú maestro ya nos contaba en 1.976.- y que buena cuenta dimos en ese Artículo denominado:

Al mayor embustero de Sevilla pág.   4.-
(Critica a Rafael Yuste López por su artículo de 1976)

            Donde su mentor manantial de las leyendas y las milongas federativas nos recreaba con un sinfín de mentiras, sacada de su bola mágica  adivinatoria, sobre episodios pasados, solo con visos de realidad en las mentes retorcidas y enfermas; que solo él y los ignorantes creen.

            Y si antes lo felicitaba por su amplia introducción, ya mil veces cacareada, por la afición; ya es hora de coger la guadaña y segar las malas hierbas cual símil de sesgar o erradicar las mentiras que crecen como las amapolas, el mijo, o el cardo, en los trigales.

            Todo Don Quijote, tiene a su Sancho que acompañado de su pollino, camina tras la estela de Rocinante, escuchando historietas en este caso “historietas palomeras”. Y para no cambiar la forma le iré colocando pequeños fragmentos de ese artículo cuya mitad es fantástica y su otra mitad es deplorable.

            En los albores del siglo XX, los aficionados Sevillanos entre los que se encontraba Gaspar Iriso, tenían en sus palomares unos animales, a los cuales por su procedencia del levante español, en concreto de Murcia, llamaban murcianos. Tenemos que entender que los palomos que había entonces solo se asemejan a los actuales en lo básico, determinadas formas de vuelo, formas de cuello o de buche. Etc. No existe un tratado que defina el tipo exacto que se utilizaba, tenemos que suponer que fueron varios tipos de palomos ya que en Murcia hay tres variedades de palomos de postura algunas ya muy diezmadas o desaparecidas.

(Fragmento tomado de la Revista Columba, escrito por Enrique Perez).

Mal empezamos, pues Gaspar Iriso Portales, no tenía ni trajo jamás palomos del levante, esos son los cuentos de tu mentor Rafael Yuste, y que hoy tu repites como un loro; Gaspar, si algo era de lo que alardeaba, era de que su afición le venía de su abuelo, y era una de las más antiguas de  Sevilla, y no en los albores del siglo XX sino en el último tercio del siglo XIX; como ya te he comentado media docena de veces, y que como tu mentor no os queréis enterar.

¿Consultas la misma bola de los cuentos que tu maestro? , pues si él, en 1983.- nos deleitaba con unos orígenes insertos y copiados de la Pigeon, al cambiar el estándar de la afición, y nos cuenta que en sus orígenes se cruzó con el Quebrado Murciano;  tú que escudriñas y manejas la bola mejor que él, aligera el formato, y nos afirma que “en concreto de Murcia, llamaban murcianos” a parte de tu mala praxis literaria, ¿no vistes también al seudo-Dios Antonin, en unos de sus viajes, tras una ingesta de estupefacientes, elevarse y ver las mismas tonterías?.
 Ya comente con tu maestro que debíais reprogramar la bola, pues esta no sirve, esta averiada, muy averiada y no hace un acertijo por mas que le frotéis o hurguéis en sus entrañas, en un ansia desmedida por intentar justificar , lo que alguna manera copiasteis allá por los primeros años de la década de los 80 del siglo pasado; tras caer en vuestras manos la Pigeon traída por Jose Morales, otro asiduo a los cuentos palomeros.

Usted mismo asiente que no existen tratados que defina el tipo exacto y que en Murcia hay tres tipos; yo que me he preocupado de buscar entre la biblioteca que maneja hoy tu maestro, he localizado varios fragmentos que luego analizaré, y que tiran por la borda tu primera exposición, calcada de las tesis de Rafael Yuste.

En Murcia tenemos el “quebrado” que es un palomo de talla reducida. Poco buche, mucho morrillo, y que en el aire intenta con su cabeza tocarse la cola. El “colguero” que es mas mediano, cuello más largo buche aperado, pero menos quebrado que el anterior. Y el “corbillon” que debido a su gran influencia del gorguero( muchos ejemplares conservan tres verrugas bajo el pico), es mucho mas grande y descolgado de buche, y que en el aire adelanta mas el cuello. De algunos de estos palomos o de la mezcla hecha ya en Andalucía de ellos, los aficionados empezaron a cruzar con el palomo sevillano por antonomasia el “Marchenero”

            (Fragmento tomado de la Revista Columba, escrito por Enrique Perez).

Y ahora vas y nos cuenta lo de los tres tipos de murcianos; ¡Bingo! ¿Eso te lo dice la bola, o te lo has inventado tu solito? ¿Cuándo los has visto, para describirlos con tanta claridad? Tu imaginación no tiene límites, nos detalla con todo lujo de detalles, el Quebrado, el Colguero, y el Corbillón y encima nos apostilla tu sapiencia palomera, con otro mito El invento del antes citado,” el toco-mocho del Gorguero de Antonin, aunque para colorear esta parte te falta el apelativo “De Córdoba”, pero claro está en la época del art. no existía, porque de seguro, nos lo habrías colocado.
Rematas la faena con el otro timo sevillano, el Marchenero;  y ahora para deleite te voy a narrar otra historia:
En Sevilla  solo tres seudo aficionados o “Aprendices de la Alfarfa”, seguís las tesis  del Inquisidor, a la sazón Rafael Yuste López, y te los voy a nombrar: Pepe Solís, del cual ya di buena cuenta en un art. denominado: Carta a Jose Solís, pág.  38.- (Al Cesar lo que es de Cesar); que de seguro ya has leído muchas veces, Augusto león Sequeiros, que también tiene otro artículo en la misma revista, y en conjunción del propio Rafael, tenéis la creencia que al Colillano , para ponerle la cola plana hay que meterle el Marchenero.

Craso error, y al hilo de esto te voy a colocar, una de esas frases lapidarias de nuestra afición, “niño no sabes que las colitas están reñidas con los cuellos”;  solo ellos son los que adoran ese mixtorro carente de figura pose o colocación al que se le llamaba en la cuna del palomo, coliconcha  que traducido al lenguaje es la hibridación de un Colillano con un  Marchenero.
¿Cuando has visto tú un murciano que lleve la cabeza a la albardilla?; ni en  la bola de los acertijos, ni en Murcia, lo vais a ver, salvo que visites algunos palomares de verdaderos aficionados al palomo Colillano.

También he de corregirte la plana en el palomo por antonomasia de Sevilla, este es el Ladino Sevillano el único que lleva el gentilicio de la ciudad de la Giralda; porque tu Marchenero o Colitejo, tal y como se le conocía, carece de gentilicio y se nombra por Marchenero a secas.


Y ahora para desmontar la milonga te colocaré algunas fotos de lo que se suponía era un Quebrado Murciano.
Este es el Quebrado Murciano según la Pigeon ¿este es el padre del Colillano? Yo te lo voy a decir: De seguro que NO.
¿Es este el padre de todas las razas que intervino?
Yo te lo voy a decir: De seguro que NO.




¿Es este el otro padre de todas las razas que intervino?
Yo te lo voy a decir: De seguro que NO.


Como vamos viendo, la obra de la que el inquisidor copia no es muy acertada en sus planteamientos, ni grafica ni escrita, he aquí lo que dice y te lo coloco subrayado para diferenciar:


 Buchón Murciano:

Buchón Murciano, Morrillero.

Origen: Sud este de España , en la provincia de Murcia. Es una variedad muy antigua y fue muy popular en la antigüedad, fue traída a España por los Árabes durante la dominación de estos en la Península Ibérica. Las primeras normas de vuelo fueron promulgadas en Murcia 1773.

Descripción: Es un buchon de vuelo creado para la competición y el robo de piezas.

Tiene la cabeza ovalada y su pico es mediano. Cuando el pájaro esta cortejando a una hembra o luchando por ella las plumas de la nuca se le erizan como si fuera un gallo de pelea, lo que explica el nombre de Morrillero.

Esta raza tiene una manera muy peculiar de vuelo. Cuando sale a volar lo hace en forma vertical como un helicóptero, y cuando esta en el aire tira su cabeza hacia atrás y su cola hacia arriba curvandola en forma de teja.

Se mueve y aletea en el aire de tal forma que pareciera por momentos estar suspendido y parado en el aire tal y cual lo hacen las aves rapaces. El buche no le cuelga en el aire ya que al tirar la cabeza hacia atrás, este le queda muy cerca del pico.

            Ahora ya sabemos de dónde viene el mito del Helicóptero ¿Sabes lo que esta describiendo? Yo te lo voy a decir, un mixto de Slenker, que es lo que se llevaron ¿acaso no sabes apreciarlo?
            Ahora ya sabemos, quien ostenta ser el padre de la Leyenda de los árabes. ¿Quien le pone fecha?  Yo te lo voy a decir: el padre del cuento es Brug Brage y el padre de la fecha del 711.- es su maestro Rafael. ¿Lo tienes claro ahora?

            Pero aun no hemos podido determinar de dónde sacas lo de llevar la cabeza a la cola seguramente de ver volar algún Colillano, (que es el pájaro que únicamente lo hace y en posición horizontal). El resto como venimos describiendo cuentos chinos.
           
Y aun hay mas, como decimos por aquí, “hay pa tos y patas” aquí te pongo algo de 1.926.- y publicado por la Comisión de Agricultura de Portugal. tal y como te cité anteriormente



Esta descripción y la de Cesar Martinez de 1.933.- son coincidentes, ¿de dónde sacáis los chismes? ¿Tal vez de la bola de los acertijos? Quizás vuestra bola no se retrotrae en el tiempo hasta estas fechas, y se quedó paralizada en la fecha de publicación de la Pigeon.

            Sigue usted con la descripción del palomo en cuestión; nuevamente he de felicitarle          por su exposición, aunque un poco corta y carente de ese léxico tan particular usado por la afición colillanista, se ve claramente que usted aunque los ha criado desconoce ese argot; tal vez porque solo se quedó en las enseñanzas de su mentor, que nunca los crió y por ello desconoce ese vocabulario.

            Cuando el ejemplar se cruza en el aire con una paloma o pasa por encima de su palomar, es cuando podemos observar ese momento mágico, llamado “reunión” y entonces el palomo empieza a ralentizar aun más el ritmo de vuelo, casi llega a quedarse parado en el aire, (parece que vuela a cámara lenta), su cuello lo estira y lo coloca recto, clavando su pico en el pecho. Su cola la abre a más de 180º, y da a sensación que el animal une su parte trasera con el pecho, cosa que da una forma redondeada a su cuerpo, que unido a la gran envergadura de sus alas, da la sensación de que el palomo es mucho más abultado de lo que en realidad es.

            Nuevamente he de enmendarle la lección, pues a lo que usted llamara “momento mágico llamado reunión” no es más que lo que los colillanistas llaman colocación, expresión rítmica animada del vuelo en celo de este palomo.

            Olvida usted en todo el artículo decir que el palomo Colillano es el único que bracea, y gracias a esa forma de volar, puede ralentizar el vuelo más que otros palomos que asiduamente reman. Y es en ese braceo ralentizado la apariencia de la que usted habla.

            La cola de Colillano cuando efectúa esa faceta no la abre a más de 180º como usted afirma, sino que la abre a 180º que es la apertura máxima de dicha cola. Deberíais poneros de acuerdo, todos los seudo escritores que pertenecéis a la misma cuerda de escritos repletos de errores manifiestos, expresión clara y contundente del poco conocimiento que tenéis del  palomo en cuestión; dado que en otro estándar confeccionado por J. Antonín Cuatrecasas afirma que el Colillano abre la cola a 90º.
            Es muy importante que durante la reunión siempre mantenga la posición de 90º con la espalda (parece una escuadra) nunca adelantándolo o tirándolo hacia atrás en exceso, y el buche debe mostrarlo un poco mas aperado, pero siempre lleno, para así no balancearlo nunca.

            Parece que en este párrafo no da usted una derecha, habla usted de solo 90º sobre a vertical y perpendicular a la línea de horizonte que forma el cuerpo, siempre paralelo al suelo. Y después se cubre usted de gloria cuando afirma que no debe tenerlo hacia adelante ni excesivamente hacia atrás; en primer lugar si lo lleva hacia adelante no es Colillano pues no tiene la expresión mínima de posición de cuello, por la cual se selecciona este palomo; y también erra cuando afirma que no debe meterlo hacia atrás en exceso, pues es precisamente el llevarlo hacia atrás en todo su exceso, 180º cuando el ejemplar es de máxima calidad, a lo que los aficionados llaman Arrastrado.

            Claro está que con esa percepción sus palomos no son Colillanos, por mucho que se esfuerce en querer adoctrinar a través de escritos como el que hoy le desmenuzo; la prueba más palpable son los ejemplares que muestra, pues a simple vista se ve claramente que son híbridos de Marchenero, que es lo que a lo largo de todo su escrito, pretende demostrar, pero no mas lejos de la realidad de los hechos, pues esos palomos, no dan ni la expresión de ser colillanos, le falta hechuras, le falta armonía, le falta inclinación de cuello; usted mismo en su escrito , afirma que debe arrullar en alto y no deben estar inclinados; a esa posición en argot colillanista se les denomina “Gachos”; pero coloquemos sus ejemplares, para verlos mejor:


Ambos ejemplares presentados son mixtos de Marcheneros, debería haberlos fotografiado en vuelo, pero de seguro que no dan la mínima de 90º para ser Colillanos.

            Vuelve a equivocarse cuando habla usted del buche en vuelo, pues en vuelo el buche del Colillano casi desaparece, y lo que muestra el pájaro es el pecho, formándosele en su delantera un revoltillo de las plumas al ser enfrentadas a la resistencia del aire, figura que ya aficionados como Francisco Reina, denominaban el “Sello” o la “Rosa”; denominándose técnicamente mostrar la “Gargantilla”.

            En mi, opinión no quiero crear controversia, que deberíamos llamar colillanos, solo a aquellos ejemplares que cumplan el estándar, y a los que no lo hagan llamarlo por sus nombres, como puede ser pájaros de figura, colgueros, murcianos etc.

            Este párrafo es de autentica risa, y debería usted aplicarlo a todos sus ejemplares en primer lugar, tanto en suelo, como en vuelo; habla usted de aplicar el estándar y yo le pregunto ¿que estándar? Pues a la luz de lo escrito tenemos cinco estándares, pero como usted dice: “para no crear controversia” le colocare  un párrafo  no del primer estándar confeccionado por la afición, en la Sociedad de la Giralda, pues solo el primero y el último están visados o refrendados por los criadores; sino el manipulado a su antojo por su mentor, para demostrarle que ni sabéis verlos ni sabéis apreciarlo y mucho menos a la vista de su artículo, interpretarlo. Y así de esa forma desacreditar todo su artículo, y por ende a usted como criador; pues a lo largo de todo su artículo, lo único que ha pretendido es justificar un hibrido intentando cuadrarle todas las características de un buen Colillano, y sin dilación le coloco el párrafo.

 Morfología: Palomo buchón de buche abultado, ovalado o redondeado y ligeramente colgante, situado en la parte frontal del pecho y rebasando hacia abajo la altura de la quilla; cuello largo ancho e inclinado hacia arriba o hacia atrás, en todas las facetas de su comportamiento estético etc.

Le he colocado en negrillas, el párrafo objeto a análisis; arriba significa vertical; y hacia atrás podemos cuantificarlo pasado de la vertical; y lo más importante: en todas las facetas de su comportamiento estético; lo que significa, tanto en parado como en vuelo.

De la lectura del mismo podemos sacar las siguientes conclusiones:
-         Que el palomo en parado ha de adoptar la posición de 90º es decir estar erguido, y que la línea imaginaria que va desde los ojos del animal hasta las patas ha de ser perpendicular al suelo; admitiéndose también todos los que desplacen su cuello +90º(cuello hacia atrás)
-         Que el palomo en vuelo tenga las mismas características, es decir desde los 90º hasta los 180º que sería la máxima posición cuando el cuello lo apoya sobre la albardilla.
-         Que toda medida menor de 90º está limitada y por tanto no admitida, tanto en suelo como en vuelo.
-         Que lo que realmente hace al palomo Colillano es la selección por su cuello.

Y visto esto podemos determinar:

-         Sus ejemplares no cumplen el estándar, pues en suelo, que es lo que podemos apreciar están por debajo de los 45º, con lo cual no es admitido; y por tanto de dudosa Raza, como he referido.
-         Que de su exposición al no crear controversia sus palomos no pueden ser llamados colillanos en palabras suyas; lo que legitima mi expresión al llamarlos híbridos o mixtorros
-         Que toda su exposición, como he afirmado solo se limita a dar cobertura a palomos que no cumplen el estándar ni en parado ni en vuelo, y que casualidades de destino; solo son criados por los aficionados que he citado, Solís, Augusto, y usted; (todos, discípulos de Rafael Yuste)
-         Que los palomos que sobrepasan los 90º hasta la máxima 180º están admitido incluso por el estándar modificado por Rafael Yuste, y por tanto ni son colgueros, ni son murcianos, pues el único palomo de figura existente en nuestros días, es el Colillano.
-         Y a la vista de lo descrito, deberíais volver a la escuela, para aprender a leer.

Termina usted con una alegoría al vuelo de este palomo, tratando de no hacer distinción entre palomos de exposición y palomos de vuelo, afirmando que deben ser los mismos, y que deben cumplir el estándar en ambos sentidos.

Mas yo le preguntaría: ¿Donde está el estándar de vuelo de este palomo?; la respuesta es simple, solo hay un estándar que específica, cuales son las características y condiciones que estos ejemplares deben de cumplir, y ese estándar único y primero en nuestra afición está confeccionado por los miembros de la Asociación de Criadores del Palomo Colillano, también denominado como Club Deportivo de Criadores del Palomo Buchón Colillano.

Pero antes de terminar con usted, quiero comentar su art. en la revista Arte Avícola, nº 23 del año 1.998.- pág. 31 (Un paseo por los cielos) con idéntico planteamiento unos años antes del que hemos comentado, con la exposición de un pájaro idéntico, es decir un mixto de Marchenero, incapacitado por todo lo expuesto al no cumplir ninguno de los estándares; pero a diferencia del artículo presente, entra usted a describir, cual maestro de los maestros, dos de las razas o supuestas razas, las cuales nadie ha visto, salvo usted, su maestro y un puñado de ignorantes hoy capitaneados por  J. Antonín Cuatrecasas, y por  la destreza que muestra en su descripción, el malabarismo adivinatorio de lo que aporta, cada uno, etc.; Habría que denominarle el Rey de los Magos.

El Gorguero. Raza base en la mayoría de nuestros buchones, esta raza aporto el cuello largo, la talla, la envergadura de ala, y la anchura de pluma.
-      Art. de la revista Arte Avícola, nº 23 del año 1.998.- pág. 31.- (Un paseo por los cielos)

Mire usted señor Enric o Enrique: en el supuesto que admitamos, la denominación anterior a 1984.- como Gorguero de Linares, nombre que fue cambiado en Asamblea por sus criadores, por el de Jienense; y haciendo un malabarismo en el tiempo, al igual que usted y su mentor hacen, cosa que es imposible; ese palomo es el cuento chino de J. Antonín Cuatrecasas, un palomo inexistente , pues todo palomo buchón, con apariencia de poseer, chepa o joroba, era denominado Gorguero;  por similitud de la  prenda de la época, incluido los Rafeños, Raza representativa de ellos, y citado por varios autores entre los que cabe destacar Cesar Martinez.

En el supuesto que se lo admitamos y  haciendo una tras locación en el tiempo y mandándolo no se sabe a que año. Un palomo que todos sabemos hoy;  que rema, que tiene unas carúnculas exorbitantes, por su condición de carunculado que arrulla  con una inclinación, de 45º o inferior, que excede en peso, por encima de los 500 gr, que no posee más de 760 cm de envergadura de ala, 12,5 cm de ancho de ala; y suponiendo y admitiendo todo lo que cualquier aficionado y usted quiera suponer ¿Qué narices va a aportar ese mixtorro de Carrier  al Colillano?

Pero sigamos con el otro invento:

El quebrado murciano. Este animal dio al Colillano, la peculiar forma de remar con sus alas, y la forma de levantar el cuello cuando vuela; también aporto el morrillo que tan elegantemente adorna su cuelo cuando arrulla.
-      Art. de la revista Arte Avícola, nº 23 del año 1.998.- pág. 31.- (Un paseo por los cielos)

Nuevamente Sr. Enric ha dado usted un piscinazo, es decir se acaba de tirar a la piscina y esta está vacía; es usted uno de los iluminados que nos cuenta con todo lujo de detalle que es lo que aporta. ¿Cuando ha visto usted un quebrado murciano? Se lo voy a volver a decir: nunca.

Pero nuevamente, le vamos a dar el beneficio de la duda, y vamos a suponer, todo las suposiciones, habidas y por haber; que el quebrado murciano expuesto en la Pigeon, es el representante de ese palomo que el mismo autor de esa obra dice:
 “Esta raza tiene una manera muy peculiar de vuelo. Cuando sale a volar lo hace en forma vertical como un helicóptero, y cuando está en el aire tira su cabeza hacia atrás y su cola hacia arriba curvándola en forma de teja.
-      Art. de la revista Arte Avícola, nº 23 del año 1.998.- pág. 31.- (Un paseo por los cielos)

Y suponiendo todo lo que se quiera suponer, incluso que ese murciano también rema, como afirma usted, aunque Brug Brage en el escrito, no lo dice;  un palomo que no tiene armonía, un palomo inclinado, un palomo largo y alpargatado, con una cabeza propia de los carunculados; ¿Usted cree que ese mixtorro puede aportar algo al Colillano?
           
            Y terminemos con el tercero:
           
            El Marchenero le confirió la clase de pluma, muy plumón, su escasez de peso, su buche lleno y ancho, y sobre todo su vuelo pausado.

            Pues mire usted, señor Enrique, este palomo también rema, aunque a usted se le haya olvidado, este palomo es el más gacho de los tres que nos ha expuesto, este palomo es el menos volador de todos los conocidos, este es el que menos envergadura posee de todos; y visto todo ello, le quiero preguntar:
¿De tres palomos que reman, como saca usted uno que bracea? Yo se lo voy a decir: de la bola de los inventos.
 ¿De tres palomos Gachos, como saca usted uno recto de patas y cuello a la vertical o inclinado hacia atrás? Yo se lo voy a decir: de la bola de los inventos.
¿Si tenemos tres palomos que poseen menos envergadura que el resultante, como nos lo explica? Yo se lo voy a decir:  la bola de los inventos esta averiada,  y usted no lo ha podido verificarlo ni medirlo.
¿De tres palomos que son incapaces de elevar la cabeza en vuelo no más de 35º vistas las fotos, como saca usted uno que no solo lo lleva a 90º sino a 180º? Yo se lo voy a decir: su imaginación no tiene límites.
¿Usted se cree todo lo que escribe? Yo se lo voy a decir: no, pero nos miente sistemáticamente.
¿Por qué no nos coloca las bibliografías donde se apoya? Yo se lo voy a decir: no existen
¿Usted se cree que todos los andaluces somos tontos? Yo se lo voy a decir: no solo cree que somos tontos sino que además nos insulta con sus escritos basura.

A modo de ejemplo, y para todo el que leyere, usted para sacar un buen perro Galgo, coge tres perros a) un Perro de Agua, b) un Perro Podenco, c) un Perro Mastín  y por arte de magia usted ya tiene un buen Perro Galgo, el que más corre, el que vas velocidad tiene y el único que coge liebres corriendo en campo abierto; eso es lo que usted ha hecho en su artículo, pero con tres palomos; su osadía no tiene límites, al igual que su imaginación.

Cabe por tanto una profunda reflexión sobre su artículo y otros de la misma guisa, que también desarrollaré, todos en la misma línea: aupar a la categoría de palomo Colillano a todo mixto procedente de los palomares de los aficionados citados, y desprestigia al grueso de la afición que crían unos ejemplares, admitidos en el estándar; denominándolos palomos murcianos, para así dar cobertura a todos los fraudes de esa Organización a la que pertenecéis, llamada RFEC; desprestigiando a los palomos de Nuestra Autonomía, y lo que es más importante tirando por tierra Nuestras Tradiciones, Nuestra Historia, y Nuestro Patrimonio Genético, en aras a preservar todas las mentiras de vuestro maestro, Rafael Yuste López, e intentar dar una hegemonía a otras regiones que hoy no tienen, ni tendrán.

Atte.
José Montoya Romero.-
Septiembre del 2.011.-